Ya llegó al Santuario de Elefantes de Brasil
Tras cinco días de viaje, la última elefanta que quedaba en el Ecoparque porteño llegó hoy al mediodía al Santuario de Elefantes ubicado en Chapadas Dos Guimarães, Mato Grosso, Brasil, en perfecto estado de salud.
El trayecto de 2.700 kilómetros se realizó por tierra y contó con un protocolo de traslado especialmente adaptado a las normativas sanitarias y, principalmente, al bienestar de Pupy, que no necesitó sedantes para hacer el viaje. La elefanta africana de 35 años había llegado al antiguo Zoológico porteño en mayo de 1993.
El traslado de Pupy se llevó a cabo gracias a un operativo conjunto entre el Gobierno de la Ciudad, el Santuario de Elefantes de Brasil y la Fundación Franz Weber. Pupy es la última elefanta que habitaba el Ecoparque porteño y la última derivación de animales de gran tamaño.
"Quiero agradecer y felicitar al equipo que trasladó a la elefanta Pupy hasta Brasil, un gran desafío para la Ciudad. Fue el último animal de gran tamaño que derivamos y ahora tendrá una mejor vida. En el Ecoparque tenemos un Hospital Veterinario de Fauna Silvestre donde brindamos atención médica a los animales que llegan de rescates que se hacen en todo el país, hasta que se liberan o trasladan", sostuvo el Jefe de Gobierno, Jorge Macri.
El viaje comenzó el lunes pasado. Durante todo el trayecto Pupy permaneció en su caja de traslado. Sus acompañantes destacaron la tranquilidad y el buen ánimo que manifestó durante todo el recorrido. La larga duración del viaje se debió a que a lo largo del recorrido se realizaron paradas para chequear su salud, ofrecerle comida, agua y compañía para entretenerla.
Al llegar al Santuario, una vez abierta la puerta, Pupy comenzó a analizar el nuevo ambiente desde dentro de la caja de traslado. No se la apuró en ningún momento privilegiando que sea ella quien maneje sus tiempos, se le ofrecieron cañas y sandía (su comida favorita) y se le dio un baño con una manguera para refrescarla, mientras miles de espectadores veían la llegada a través de la transmisión en vivo que se ofrecía por la cuenta del Ecoparque.
Los expertos que realizaron el traslado coincidieron en la importancia de los trabajos previos que se hicieron junto a Pupy y que involucraron entrenamientos para la realización de estudios médicos y para fortalecer su vínculo con la caja de transporte.
Luego de la llegada, la elefanta permanecerá en un cobertizo exterior que está dentro del Santuario para que pueda comenzar la adaptación a su nuevo hogar. Por lo general, a la mayoría de los elefantes les gusta frotarse en la arena, tomar agua y dormir una siesta. Todo sucederá al ritmo que ella proponga. En los días siguientes el animal irá descubriendo su nuevo ambiente, las nuevas oportunidades de dieta y comenzará a conocer al equipo técnico del lugar.