Una inspección integral a un centro de estética ubicado en el barrio de Colegiales, ordenada por la Fiscalía PCyF 11, a cargo de la Dra. María Valeria Massaglia, finalizó con el secuestro de diversos equipos para tratamientos estéticos y productos cosméticos que no contaban con la autorización correspondiente y eran, por lo tanto, peligrosos para la salud humana.
El procedimiento fue llevado adelante en un comercio ubicado en la Avenida Álvarez Thomas al 1100 por personal del Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, la División Delitos Contra La Salud y la Seguridad Personal de la Policía de la Ciudad, la Dirección General de Fiscalización y Control (DGFyC) y la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
La inspección permitió detectar diversos equipos de tratamiento estético facial con inscripciones ilegibles y sin ningún otro dato ni documentación reglamentaria; dispositivos de mesoterapia sin información de titular importador, de fabricante ni tampoco de las autorizaciones sanitarias correspondientes.
Además, se hallaron microagujas para mesoterapia, sin ninguna identificación de origen, ni nombre comercial, marca o autorizaciones sanitarias, y una máquina centrífuga, la cual explicaron que es utilizada por una estudiante de enfermería para realizar tratamientos de plasma en plaquetas, ante lo cual se dispuso el secuestro del equipo mencionado.
Por tal motivo, y dada la peligrosidad de la situación para la salud humana, se procedió al secuestro de todas las historias clínicas de los pacientes, la documentación del lugar, la aparatología en infracción y los productos cosméticos que se hallaban en el lugar.
Finalmente, la fiscal Massaglia imputó a la responsable del establecimiento por los delitos contra la salud, en infracción a los artículos 201 y 208 del Código Penal.