Una inspección integral a un lavadero de autos en el
barrio de Pompeya, ordenado por la Unidad Fiscal Especializada en Materia
Ambiental, a cargo del Carlos Rolero Santurián, determinó la clausura judicial
preventiva del lugar por violación de clausura previa y constatarse diversas
contravenciones contra el medioambiente y la salud pública.
La inspección fue realizada por personal del Cuerpo de
Investigaciones Judiciales del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, el
Departamento de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina, junto a
las Direcciones Generales de Control Ambiental (DGCONTA) y de Fiscalización y
Control (DGFYC) del Gobierno de la Ciudad.
Durante el procedimiento, se detectaron numerosas
irregularidades y no se encontraron aptas las condiciones de seguridad, higiene
y funcionamiento.
Producto de la actividad del lavadero, se vertían
diversos efluentes líquidos en forma directa hacia la red cloacal, sin la
correspondiente autorización. Asimismo, se logró determinar la violación
efectiva de las clausuras previas al lugar, por lo que se dispuso su clausura
judicial.
Frente a tales hechos, el fiscal Rolero imputó
provisoriamente a los responsables del establecimiento por infracción a los
artículos 83 y 57 del Código Contravencional. Asimismo, se dispuso el tapiado
del lugar para hacer cesar inmediatamente los efectos contra la salud pública.