El Gobierno porteño informó que, en el marco del Proyecto Integral de Convivencia Vial aprobado en diciembre de 2021 en la Legislatura, desde hace dos meses entraron en vigencia las nuevas penalidades para las personas que den positivo en un control de alcoholemia, siendo a partir del 1 de Febrero retenidas 884 licencias y alrededor de 450 personas las que realizaron el curso de educación vial obligatorio para recuperar su registro.
Esta propuesta —que forma parte del Plan de Seguridad Vial de la Ciudad con el objetivo de seguir disminuyendo las víctimas fatales a causa de un siniestro vial— fue diseñada con el apoyo de la Fundación Bloomberg Philanthropies y trabajada en conjunto con las organizaciones de familiares de víctimas en siniestros de tránsito.
“Ninguna muerte en el tránsito es aceptable y los controles salvan vidas. Las estadísticas nos marcan que en uno de cada cinco siniestros fatales en la Ciudad está involucrado el alcohol: los controles aleatorios y sostenidos en el tiempo, con presencia en las calles, son el camino para revertirlo. Cada licencia retenida, cada control, es una conducta de riesgo menos y una calle mejor para todos” Dijo la secretaria de Transporte y Obras Públicas, Manuela López Menéndez.
"Para nosotros, garantizar la seguridad vial también es parte de una política integral que busca mejorar la vida de los vecinos. Por eso seguimos el proceso de sanción de los conductores desde la emisión de la infracción hasta la finalización de los talleres de manejo responsable. Estamos aplicando la misma eficiencia con la que combatimos el delito a erradicar el alcohol al volante en la Ciudad", afirmó el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Marcelo D´Alessandro.
Según informó el GCBA, uno de cada cinco siniestros fatales registrados en la Ciudad están relacionados con el consumo de alcohol, por eso la Secretaría de Transporte y Obras Públicas realiza controles los 365 días del año en diferentes puntos estratégicos.