El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a partir de las nuevas disposiciones de restricción en las que sólo pueden circular trabajadores esenciales hasta el 30 de mayo, dispuso alrededor de 300 Agentes de Tránsito y 100 concientizadores en los distintos Centros de Trasbordo para acompañar a los vecinos en el cumplimiento de los protocolos.
Los Agentes de Tránsito verifican el permiso de circulación en transporte público y los concientizadores se ocupan de reordenar las filas y los flujos peatonales para que se cumpla el distanciamiento social y el cumplimiento de los protocolos establecidos (ventanillas abiertas, cantidad permitida de personas de pie, etc.).
Según fuentes del Gobierno porteño, en los próximos días se seguirá trabajando en los distintos Centros de Trasbordo con la finalidad de generar más espacio de espera para los usuarios de colectivos, favorecer el distanciamiento social entre los usuarios de transporte público, crear un entorno más seguro en términos de seguridad vial para los transeúntes y ordenar los flujos peatonales para facilitar la circulación de personas.