La Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental realizó un procedimiento en una veterinaria ubicada en la Avenida Córdoba al 1400, en el cual se secuestraron 48 aves que no se encontraban autorizadas para su comercialización.
Según informó el Ministerio Público Fiscal, el fiscal Carlos Rolero Santurián ordenó la inspección luego de recibir tres denuncias por parte de personas que habían advertido que los animales se encontraban en malas condiciones físicas.
Como consecuencia del procedimiento delegado en el Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) y en la División Operaciones Especiales a Requerimiento del Ministerio Público Fiscal de la Policía de la Ciudad, se pudo verificar que el lugar funcionaba con graves falencias en las condiciones de funcionamiento, seguridad e higiene.
Por tales motivos, se resolvió la clausura administrativa del lugar por parte de la Agencia de Protección Ambiental (APRA) y de la Agencia Gubernamental de Control (AGC).
Finalmente, a instancias de los médicos veterinarios intervinientes, se pudo determinar que se trataba de especies que no estaban incluidas en el Código de Habilitaciones como aquellas autorizadas para su venta y se procedió al secuestro de 48 aves.