Una vez al año, en Las Vegas, Estados Unidos, se celebran los “World Pizza Games”, el campeonato mundial que premia, por ejemplo, a quien realice las mejores acrobacias con masa de pizza. Ezequiel Ortigoza, el campeón vigente en la categoría "Acrobacia free style", nació y creció en Lanús, más precisamente en la localidad de Monte Chingolo.
Su papá Wildo y su hermano Claudio trabajaban en "El Cuartito", una de las míticas pizzerías porteñas. Allí Ezequiel heredó la pasión por la masa. Lavó copas e hizo repulgues para empanadas, hasta que un día le ofrecieron incorporarse al equipo de pizzeros. Hoy, con 25 años, Ortigoza es maestro pizzero en uno de los Bares Notables de la Ciudad de Buenos Aires.
"Pasaba horas frente a la computadora observando videos, aprendiendo de los mejores acróbatas de pizza del mundo. Ellos practicaban con masa de silicona que sólo se vende en Europa, así que tuve que improvisar con una rejilla que tenía en casa. En Las Vegas, incluso, antes de competir ensayaba con una rejilla, y aquellos mismos maestros que yo miraba por Internet quedaron maravillados y se acercaron a felicitarme", cuenta Ezequiel, alumno de la prestigiosa Escuela APPyCe, la Asociación de propietarios de Pizzerías y Casas de Empanadas de la República Argentina que nuclea a todos los pizzeros del país.
Ortigoza ya es un personaje conocido y reconocido en el mundo de la pizza. En 2017 obtuvo el primer puesto en Free Style en el Campeonato Argentino de la Pizza y la Empanada, y la séptima colocación en el Campeonato Mundial de la Pizza en Parma, Italia.
El domingo 11 de noviembre, la Escuela APPyCe logró romper dos récords Guinnes: mayor número de pizzas preparadas en 12 horas (por equipo) y mayor número de empanadas servidas en ocho horas.